hola mi nombre es arelis momblanc cabahilón soy católica hace inicié en la iglesia en el año 1998 hace 20 años y cuando vi esta página me gustó mucho porque habla de temas importantes soy casada por la iglesia hace 17 años y por lo que veo con mi pareja todo me va bien gracias a dios, pero tengo la curiosidad esa de saber porqué si a travez de los años estando juntos si existe amor mucho amor, porque nunca debe de apagarse aunque como bien dice en el primer mandamiento amar adios sobre todas las cosas, primero está él que nos acompaña siempre dia a dia.
“que dios la bendiga” y espero respuesta..
¡Es un lindo regalo de Dios el que después de 17 años tu matrimonio siga bien! Esperamos que por muchísimos años más 🙂
Respecto a lo que nos hablas, hay una figura muy bonita y sencilla de entender. Imagínate un triángulo. Tú en una esquina, tu esposo en la otra y en la punta, arriba, está Dios. Mientras más subes, mientras más cerca de Dios estén, el triángulo (o pirámide) se empieza a cerrar. Automáticamente tú y tu esposo estarán más cerca de Dios y más cerca entre ustedes.
Amar a Dios no excluye al resto, todo lo contrario, nos aviva ese fuego interior que nos permite amar aún más.
buenisimo
Gracias,muy claro,como siempre.
hola mi nombre es arelis momblanc cabahilón soy católica hace inicié en la iglesia en el año 1998 hace 20 años y cuando vi esta página me gustó mucho porque habla de temas importantes soy casada por la iglesia hace 17 años y por lo que veo con mi pareja todo me va bien gracias a dios, pero tengo la curiosidad esa de saber porqué si a travez de los años estando juntos si existe amor mucho amor, porque nunca debe de apagarse aunque como bien dice en el primer mandamiento amar adios sobre todas las cosas, primero está él que nos acompaña siempre dia a dia.
“que dios la bendiga” y espero respuesta..
Querida Arelis,
¡Es un lindo regalo de Dios el que después de 17 años tu matrimonio siga bien! Esperamos que por muchísimos años más 🙂
Respecto a lo que nos hablas, hay una figura muy bonita y sencilla de entender. Imagínate un triángulo. Tú en una esquina, tu esposo en la otra y en la punta, arriba, está Dios. Mientras más subes, mientras más cerca de Dios estén, el triángulo (o pirámide) se empieza a cerrar. Automáticamente tú y tu esposo estarán más cerca de Dios y más cerca entre ustedes.
Amar a Dios no excluye al resto, todo lo contrario, nos aviva ese fuego interior que nos permite amar aún más.
¡Esperamos haberte ayudado!